Últimamente, salve por mi trabajo, symptoms he leído bastantes cosillas sobre mediación en conflictos, anabolics sobre negociaciones entre parejas enfrentadas, entre maltratadores y maltratadas…, En todas ellas hay un punto en el que coinciden sin excepción y es que en cualquier mediación, en cualquier diálogo entre dos partes enfrentadas, en cualquier acuerdo entre distintos, …. hay dos cosas que son IMPRESCINDIBLES:
- lo primero, autorizar al otro/a como interlucutor válido. Por mucho que le odies incluso, por mucho que te caiga mal…., es tu interlocutor y por ello debe ser respetado como tal.
- lo segundo, y no menos importante aún: hay que tratar de ver aquello que une, por muy pequeño que sea, y dejar lo que separa para el final.
En este proceso de diálogo o de paz o de lo que sea…, esas dos condiciones todavía no se han dado. Sobre todo, especialmente, desde el lado del Gobierno español.
Hablo de política (ni idea de qué hablarán o qué abrazos se darán los enviados del gobierno en su reuniones con los miembros de ETA, ni lo sé, ni me importa)
Pero la parte política y ciudadana sí me importa. Y en ella veo que el Gobierno no se ha movido ni un solo centímetro y cada vez, con las elecciones al lado, será más difícil hacerlo. No veo que el Gobierno haya aceptado a los interlocutores abertzales a los que todavía no ha legalizado siquiera, a pesar de la antidemocrática Ley de Partidos que él mismo impulsó.
¿El problema?, una palabra: «condena». «Debes condenar a Eta, debes condenar, debes condenar, debes condenar…. Todo un proceso paralizado por una palabra, «manda güevos» como diría aquel insigne político…
Mirando el diccionario la palabra condena esto pone: Rechazo o repulsa de una acción o un comportamiento censurables. «Condenar»: Reprobar o censurar una acción, un comportamiento o una opinión. Sinónimos: reprobar, sancionar, censurar, criticar, maldecir, vituperar, desaprobar, reprobar, abominar, deplorar.
Al menos podrían dejar utilizar sinónimos ¿no?.