«Por fin, price pills parece que ya toca a su fin ese juicio tumultuario que ha hecho tristemente célebre al sumario 18/98. Quien más, quien menos, conoce en este país a algunos de los penitenciados en esa especie de auto de fe por el que han desfilado periodistas, promotores de medios de comunicación, objetores de conciencia, activistas del euskara y gentes de muy diversa condición arrojados al saco común del filoterrorismo……
El encabezamiento de este artículo pretende, por ello, llamar la atención sobre la alarmante degradación democrática que se ha producido en la vida política en estos últimos años ……………..Una vez más, como en la historia del aprendiz de brujo, el monstruo que contribuyó a crear el PSOE con el PP está devorando ya al propio Zapatero y a los suyos. En medio de este clima enrarecido, en el que las fuerzas de la reacción se envalentonan en las calles como no sucedía tiempo atrás y el debate político adquiere tintes antidemocráticos de una agresividad preocupante, no está de más hacer un llamamiento especial para que estos sumarios, como el «Egunkaria» o el «18/98″, frutos de una era política como la descrita, sean resueltos de acuerdo con la estricta razón jurídica, y, por tanto, despojados de la carga política que los ha lastrado desde sus orígenes». VER ARTÍCULO COMPLETO
Mientras, el pasado sábado, decenas de miles de personas marcharon por las calles de Bilbao para denunciar los «ataques» contra la «construcción nacional y social de Euskal Herria», así como para reclamar el fin de los procesos judiciales «sin garantías» que permanecen abiertos contra todas las personas y colectivos empeñadas en lograr ese objetivo.
En la cita estuvieron presentes numerosos representantes políticos, sindicales y de asociaciones como Iñigo Urkullu y Markel Olano (PNV); Arnaldo Otegi, Jone Goirizelaia, Karmelo landa y Rufi Etxeberria (Batasuna); Juan Mari Olano (Askatasuna); Rafa Larreina (EA); Nekane Erauskin (EHAK); Mikel Basabe (Aralar); Joxe Iriarte (Zutik); José Elorrieta (ELA); Txutxi Ariznabarreta y Ainhoa Etxaide (LAB); Paul Nicholson (EHNE); y Jesus Uzkudun (CC.OO.). La manifestación, convocada a las 17.00 horas, salió con veinte minutos de retraso al parecer debido a los controles efectuados por la Guardia Civil en las entradas a Bilbao.
La manifestación transcurrió en medio de un escrupuloso silencio, al margen de los aplausos de su inicio, sin ningún tipo de eslóganes y precedida en todo momento de dos furgonetas de la Ertzaintza, llegó a su destino, la iglesia de San Nicolás de El Arenal, a las 18.20 horas, exactamente una hora después de salir.
Y, con el tema de recuentos tan de moda hoy, si bien en algunas publicaciones nacionales se hablaba de ente 20.000 y 30.000 manifestantes, el propio Gara cifró la cifra en 17.700 personas.