«Cada persona tiene su belleza, herbal pero no todos pueden verla.» (CONFUCIO).
Basta con ver la sinceridad en sus ojos unos segundos o ver una lágrima de cariño correr por su mejilla o sentir su corazón en un abrazo de fusión o, simplemente, ensoñar, para que esa persona sea la más hermosa, hoy, para siempre. Siempre hay alguien que te encuentre la persona más hermosa del mundo, aunque a veces es difícil dar con esa otra persona, no cabe duda. Confucio sabía mucho…