Este sábado unas 115.000 personas se manifestaron en Bilbao, order a pesar de la lluvia, para defender el derecho de todas las personas presas vascas a estar cerca de sus lugares de origen y contra la dispersión política de los presos y presas.
Desde que comenzó, siempre he manifestado que el castigo de la dispersión (aparte de ser ilegal y antidemocrático por aplicarse a unas personas sí y otras no, solo por el hecho de donde provengan), es una actitud totalmente dictatorial y fascista, propia de países con esos regímenes. Eso me ha acarreado decenas de críticas en este blog, insultos e incluso alguna amenaza por escrito pero bueno, siempre he pensado también que esa gente que lo hace no tiene dos dedos de frente y por ello no me ha merecido la pena nunca nisiquiera contestarles. Su actitud fascista insultándome por el hecho de ir a favor de los derechos humanos de todas las personas, sean presas y hayan cometido delitos o no, es la que hace que tengamos el gobierno que tenemos y que cada vez haya más actitudes fascistas en quienes nos gobiernan.
Todavía no había salido la gente del lugar donde empezaba la manifestación cuando los primeros ya llevaban 40 minutos desfilando y las calles por donde debía discurrir la manifestación estaban llenas de gente. Y eso que el PNV como partido no se adhirió, pese a que algunos simpatizantes sí que asistieron, no había llamado a movilizarse. Mucha gente no pudo llegar al acto final incluso. En realidad la movilización consistió en que los familiares de presos, exiliados y deportados, y quienes portaban la pancarta, completaron el recorrido –tardando para ello más de hora y media– abriéndose camino entre los manifestantes que no podían ni incorporarse a la marcha. Muchos miles iniciaban recorridos paralelos para avanzar por otras vías.
Al final, cuando hacía tiempo que el acto que cerraba la marcha había terminado, por la calle Hurtado de Amezaga seguían bajando miles de manifestantes
La manifestación fue convocada por la plataforma Herrira (“al pueblo”). Al “no como partido” se sumó el democrático PSE que añadió que NO daba a sus militantes libertad para decidir si ir o no (por supuesto el PP se posicionó en contra, al hilo de lo que publica “El Mundo”. (pero muchas personas, mucho más libres que los partidos, sí se sumaron individualmente, y se pudo ver en la marcha a Ainhoa Aznarez, del PSN (en representación de Ahotsak, esas mujeres valientes sin pelos en la lengua), a José Luis Uriz, a Iñaki Zarraoa del PNV (también dijeron que asistirían otras del PNV como Arantza Itxasmendi, Usune Retolaza y Amaia Goirigoltzarri aunque no se conformó). Por supuesto, estuvieron muchos representantes de los 4 partidos que componen EHBildu, de Aralar, de Ezker Batua, de lso sindicatos Ela y Lab y otros, y gente de las catalanas ERC y CUP (el diputado republicano Joan Tardá y el portavoz parlamentario de las CUP, David Fernández), ambos profusamente criticados por la caverna española ayer y hoy mismo.
La manifestación Pese a que la previsión era que la manifestación fuera silenciosa, fueron constantes los gritos de «Euskal presoak Euskal Herrira!». Abrían camino entre la multitud las furgonetas de los voluntarios que cada fin de semana llevan a familiares a las cárceles. La organización dispuso a continuación un autobús de dos pisos para los cámaras.
Quienes encabezaban la marcha era las cientos de madres, padres, hijos e hijas, hermanas, novios y novias y otros familiares de los presos y presas vascas.
Hablando de Catalunya, tanto los citados Tardà como Fernàndez han firmado el documento «Preses i presos bascos al País Basc» que han suscrito 70 destacadas personalidades catalanas que exigen el cumplimiento de «los derechos humanos básicos de los presos y presas vascos». Entre los firmantes se encuentran personas de diversos ámbitos y sensibilidades como Arcadi Oliveres (Justícia i Pau), Xavier Masllorens y Jordi Armadans (Fundació per la Pau), Vicenç Fisas (Cátedra Unesco-UAB), Gabriela Serra y Pere Ortega (Centre JM Delàs), la recientemente traspasada activista feminista Consol Casals (Dones per Dones), Tica Font, Rafael Grasa, Alejando Pozo, el cantante Lluís Llach, el periodista Vicent Partal o el sindicalista agrario Pep Riera. En el ámbito político, suscriben también el comunicado el diputado en Madrid Carles Campuzano (CiU), así como numerosos diputados del Parlament de Catalunya, entre los que destacan Oriol Junqueras, Marta Rovira y Gemma Calvet por parte de ERC; Georgina Rieradevall y Quim Arrufat de la CUP; y Dolors Camats y David Companyon de ICV-EUiA.
Me gustaría destacar lo que dijo la integrante del PSN y de Ahotsak Ainhoa Aznárez: el de ayer era «un momento en el que es necesario estar». A su entender, «en este momento el Partido Socialista tiene que presentarse porque hay gestos y símbolos que son necesarios, por una parte y por la otra». Se ha trabajado mucho para llegar a este punto y «ahora toca reivindicar los derechos de los presos y las presas que viven situaciones muy precarias». Se trata «de garantizar los derechos humanos y de cumplir la ley, que está para ello».