Maximino Couto, medicine 60 años, cumplía condena de 2,5 años por malos tratos a su ex mujer. Le quedaban 20 días para salir de la cárcel y tenía un permiso especial de 4 días como “preparación a su puesta en libertad (según el director de la cárcel). En este permiso fue a Ponte Caldelas (Pontevedra), a casa de su pareja actual , María José Peso, de 57 años, y la asesinó dándola golpes contra el suelo. Posteriormente fue a casa de su exmujer aunque no la encontró pero sí pudo herir de gravedad a un matrimonio que había declarado en su contra además de a un policía que trató de detenerle.
Se repiten todas las circunstancias clásicas de este tipo de violencia machista: fallo en la seguridad (¿Cómo es posible que pudiera acercarse al domicilio de su exesposa de la que tenía orden de alejamiento y eso que se supone que llevaba un dispositivo GPSD para que no pudiera acercarse?), reincidencia, venganza, perdón (la asesinada incluso había pedido la semana pasada en la cárcel que le excarcelaran)…. Demasiadas circunstancias, demasiadas veces ya en este tipo de asesinatos.
Con esta mujer son ya 68 las mujeres asesinadas en lo que va de año por sus compañeros o excompañeros (se incluyen una decena de ellas que no son computadas todavía como violencia machista por el Ministerio de Igualdad por seguir en investigación o por no poderse probar el asesinato al haber sido muertes atribuidas a causas naturales tras una discusión, suicidios de mujeres acosadas, etc). Siguiendo la campaña UNA POR UNA esta entrada TRES POR UNA visibiliza a una mujer de corazón, en una época donde las mujeres estaban totalmente subordinadas a l marido e hijos/s.. (podéis ver otro listado en el siguiente enlace)
Abigail Smith (Massachusetts, 1744-1818) Primera Dama en la casa Blanca)
Hija del reverendo William y Elizabeth Quincy Smith, acompañaba a su madre cuando le llevaba comida y ropa a los pobres aprendiendo que era su deber ayudar a los necesitados.
Cuando Abigail creció, pidió ir a la escuela, pero su madre le dijo que no. Sólo a su hermano le fue permitido ir. Esa fue la primera vez que se dio cuenta de que las mujeres no tenían los mismos derechos que los hombres. Su madre creía que el trabajo de la casa era más importante, y le enseñó a cocinar, a limpiar, a coser, a limpiar, a cuidar a los enfermos y a cultivar la huerta y el jardín. Abigail aprendió a leer y a escribir en casa. Pasaba muchas horas leyendo en la biblioteca de su padre. La biblioteca se convirtió en su escuela.
A los diecisiete años, Abigail conoció a un joven abogado llamado John Adams, se casaron en 1764. John se convirtió en un buen orador en contra de los británicos y a favor de los colonos americanos por lo que frecuentemente se encontraba fuera de su casa mientras Abigail se encargaba de los animales, de la tierra y del dinero, hasta que en 1768 Abigail se trasladaron a Boston.
En 1773 los colonos llamados Hijos de la Libertad se disfrazaron como indios y quebrantaron la ley volteando las cajas de almacenamiento del té de los barcos británicos en el puerto de Boston, esta protesta hizo que Abigail se llevar a sus hijos a lugar seguro. En 1775 comenzó la Revolución Americana y mucha gente que huía de Boston pasaban por la finca de Abigail donde les acogía y les daba comida y refugio.
Las cartas de Abigail contando la terrible batalla de Bunker Hill sirvieron para mostrar a mucha gente lo que de verdad estaba ocurriendo y ello la animó a seguir escribiendo sobre otros temas, como por ejemplo proclamas contra la esclavitud, que fueron desatendidas. Así, en 1776 se leyó en Boston la Declaración de Independencia, se estipuló que las colonias fueran liberadas de las reglas británicas, pero tristemente fueron ignorados los derechos de la mujer y la libertad de los esclavos.
En 1788, John y Abigail, tras pasar por varias embajadas europeas volvieron y fueron aclamados por la multitud en el puerto de Boston. Al año siguiente, George Washington fue elegido el primer presidente de los Estados Unidos y John Adams fue elegido vice-presidente.
John fue elegido presidente en 1796. Como primera Dama, Abigail recibió a gente importante. Cuando la capital fue trasladada a Washington, D. C. ella fue la Primera dama qe habitó la Casa Blanca.
Abigail siempre creyó que su rol más importante era ser esposa y madre pero también habló en contra de la esclavitud y por los derechos de la mujer. Ella escribió, -Nunca consentiré tener nuestro sexo considerado inferior. Más de dos mil cartas escritas por Abigail aún existen, y demuestran su espíritu y coraje.