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ONGI ETORRI

Pactos para la infidelidad de la pareja (segunda parte)

Jul 17, 2008

Segunda parte del texto escrito por Lom.  Completa la  primera parte expuesta en esta entrada y es la introducción más teorética al tema en sí, medic los pactos de pareja, discount cuando son posibles, cuando son deseables o cuando son necesarios. Muchas veces atesala de rupturas, otras veces descansos individualistas, otras amagos de sueños no alcanzados nunca. Pero ¿son necesarios lso pactos?, ¿seguro?. Cuando amas con pasión… ¿arreglarían algo?. Es posible que no:

El caso es que este tipo de situaciones, pactos y engaños que están al orden del día (o de la noche) es mas frecuente de lo que uno cree bienintencionadamente y no estoy hablando de parejas liberales o que practiquen swinging sino de puros y duros convencionales con roles típicos sociales de hembra provocadora, sabedora de su poder sexual y de macho atractivo y “matador”… No hablo, por tanto de liberalización (que estaría en un plano más ideal) sino de formas en los que las personas convencionales se saltan la norma social, la apariencia o el criterio común establecido (ya se sabe, hecha la ley, hecha la trampa) sea este sano o no que es otra cuestión que no entro en este momento. Estamos hablando de placeres “ocultos”
El tema de la conversación me dio para pensar. Así que he escrito las reflexiones que me suscitan sin animo de ser exhaustivo y me temo que quizá poco objetivo en algunos momentos puesto que me puede mi propia cultura, limitación y pensamiento al respecto. Por lo que pido perdón si me extralimito o me paso…no deja de ser una opinión personal. Sobre estos temas y sobre la liberación o el permiso o sobre el intercambio y que es ser pareja liberal, tema que cuando lo he tratado por escrito o conversado como opción de uso y su sentido, con sus pro y contras siempre ha tenido polémica. Pero no dejan de ser otra distinta postura de pareja que observamos y de las que aquí solo mencionaremos de pasada y al final de todo.
Ser liberal no es que me pueda permitir hacer lo que quiera. No es tampoco hacer de todo. No es tener permiso para acostarse por ahí. Cada pareja sabe lo que hace (se supone, ya que la realidad es otra) y por respeto no se puede censurar lo que deciden en la intimidad. Sin embargo no podemos olvidar que la pareja supone sobre todo compromiso, lealtad, sinceridad, entrega y dar más que recibir…. En un primer análisis previo una pareja sana puede decidir hacer lo que considere ¿pero realmente estamos sanos?

Si lo que hacemos en pareja, a través de pactos y sin ellos, es alimentar nuestra vida de “no pareja”, dar rienda a nuestro individualismo frente a lo común, hay que estar muy cuerdo, equilibrado y consciente para que eso no acaba resultando un fiasco y un ruptura real con el tiempo. ¿Puede hacerse?.  Si, cómo no,  pero realmente, la realidad cotidiana, lo frecuente es que no sea fácil, no sea cómodo y no sea sano para la pareja (es la salsa de las crisis y de las peleas, las rupturas y las pérdidas de amor pero también las crisis de superación de logro y avance con o sin pareja). Por eso es conveniente no dejar sin reflexión seria los riesgos y problemas que una vida independiente de cada miembro de la pareja puede acarrear pese a los buenos propósitos con la que se conceda o plante. El sexo es un aspecto de nuestras vidas que cala muy hondo, se entronca con necesidades básicas, se entrelaza con rollos personales, inseguridades, aspectos no reconocidos de uno mismo y puede dar lo mejor y lo peor de nosotros. Además alrededor del sexo y la pareja está la posesión, el poder, la autoestima, las necesidades insatisfechas, las adicciones, los sentimientos mas hondos, el control, el dominio, la conquista, la competitividad, los celos, los odios, las mentiras, ….las mentiras… Decía Sófocles hace tanto… “Una mentira nunca vive para llegar a vieja” y he escuchado algún refrán para opinar al respeto que viene a cuento como “de una mentira cientos se derivan” o el proverbio judío de “con una mentira puede irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver”. ¿Cuántas veces nos mentimos a nosotros mismos además de a los demás? Leí en un blog un anónimo que decía “la mentira es lo que prolonga el tiempo de una relación en crisis”.. ¿ Pactos de pareja para la infidelidad? ¿pactos para crecer en pareja? O ¿pactos para la mentira?
Esa cuestión importa de verdad.. Un pacto es como los que veíamos en las películas entre los indios y vaqueros… A veces sincero, honesto y con ganas de cumplirlo por ambas partes y a veces deshonestos, engañadores, llevando la traición y la ruptura del mismo bajo la manga y justificativos para lograr algo oculto por uno de los bandos del pacto.. Quizá es que con frecuencia el pacto no se hace de igual a igual y siempre hay un débil que debe pactar a la fuerza para sobrevivir.

En realidad aunque estemos hablando de un tipo de pactos para permitirse infidelidad tenemos que decir que las parejas hacemos pactos siempre, y todos son necesarios para el equilibrio de la misma o para una compensación de un desequilibrio. Unos son de facto y otros dialogados y propuestos conscientemente. Algunas veces los pactos son fruto de las necesidades insatisfechas o de deseos que uno quiere desarrollar más allá del mundo de la pareja. Pueden ser pactos de todo tipo. Para salir con la cuadrilla, para ocupar tiempo en tal afición, para desarrollar un hobby particular que desea, para acordar un ritmo cualquiera de vida, etc… Con la pareja pactamos todo lo posible si bien muchas veces esos pactos tácitos y programables son deseo de uno y no del otro, acuerdos por los que uno cede para el otro más que acuerdos para que los dos hagan tal o cual cosa. Forma parte de la convivencia diaria y la manera en que evitamos conflictos con frecuencia. Pactar es una forma de llegar a cumplir con ese equilibrio necesario entre el mundo de la pareja y el mundo individual de cada miembro. Esos acuerdos de permiso en realidad son las alas que permiten que cada miembro de la misma se desarrolle y crezca y que la dependencia del uno y el otro no sea tan sino compartir un compromiso mutuo. Y digo compromiso, sí, mas que amor como sentimiento. En realidad los pactos de permiso sexual, como el resto, son un mecanismo para tener tu cota de individualismo necesario, de vida personal aparte de la pareja. Lo que quieras conseguir con ese pacto o como gestiones esa libertad o permiso es otra cuestión.. Te hará crecer o te hará degenerar… todo depende incluso de quien lo mire.. pero ….. ¿cómo cumplirlo con honestidad y equitatividad para los dos?