Hoy se celebra el Día Internacional contra la violencia contra las mujeres y nos hemos despertado con un asesinato más…
Ocurrió ayer día 24 de noviembre, en Fuenlabrada (Madrid), Alia Díaz García, de tan solo 26 años, estaba en su coche cuando se acercó su novio y la degolló tras una discusión. Posteriormente el hombre, de 29 años, llamó a la madre de la mujer para contárselo, siendo detenido al lado del cuerpo de la joven.
Con esta mujer son ya 45 las asesinadas por sus compañeros o excompañeros en lo que va de año (ver este enlace), cinco de ellas no contabilizadas todavía en el listado del Ministerio: cuatro por estar en Investigación todavía (Fuengirola, Frigiliana, Premiá de Mar y Lugo) y una porque la asesinada no es pareja sino madre de ésta, pero ambas fueron tiroteadas en el mismo acto y por ello la cuento. Además hay otras cuatro contabilizadas por el Ministerio como «casos en investigación» (Porto Do Son – Lugo, Madrid, Las Palmas y Algeciras) no expuestas en este listado. Las muertes han ocurrido en:
Andalucía: 6 (Málaga**, Sevilla (2), Cádiz* y Huelva), Castilla La Mancha: 3 (Guadalajara y Toledo), Castilla y León: 6 (Salamanca (2), Ávila, León y Burgos (2)), Madrid: 2, Extremadura: 1 (Badajoz), Catalunya: 5 (Tarragona (2) y Barcelona (3*)), Comunidad Valenciana: 6 (Valencia (2), Castellón y Alicante (3)), Baleares: 6 (Mallorca (5), Ibiza (1)), Asturias: 2 , Galicia: 2 (Lugo*), Aragón: 3 (Zaragoza), Canarias: 2 (Santa Cruz de Tenerife y Gran Canaria), Melilla (1), Pais Vasco 1 (Bizkaia)
(*) Cada * implica un caso en investigación por Ministerio o no oficiales todavía por otras causas.
Siguiendo la campaña de visibilización de este Blog, resumo una vez más a mujeres de los siglos anteriores al siglo XX, perdidas y olvidadas en la historia, una Historia que en su mayor parte ha sido escrita por hombres e impregnada de patriarcalismo, misoginia y machismo generalizado durante tantos y tantos siglos…
Esta vez visibilizo una mujer del siglo XIX, una de las que, junto a su pareja, protagonizan una inmensa historia de amor, que buena falta nos hace en este mundo tan cruel.
Anita Garibaldi (nombre completo: Ana María Ribeiro de Jesús). (Brasil, 1821-Italia, 1849)
Anita fue la Fue la célebre y combativa esposa de Giuseppe Garibalidi, uno de los principales líderes y artífices de la Unificación Italiana. Fue apodada “Heroína de los Dos Mundos”.
Hija de inmigrantes de las azores en Brasil, de gran inteligencia y carácter libre.
Se casó a los quince años, presionada por su madre, con un zapatero enriquecido bastante mayor que ella llamado Manuel Duarte Aguiar, pero fue un fracaso ya que Manuel , aparte de bebedor y mujeriego, la maltrataba.
Entre 1835 y 1845 se dio en Brasil la llamada Guerra de los Farrapos (harapos), de carácter separatista, en la entonces provincia de Río Grande del Sur y la región de Santa Catarina constituyéndose en una república independiente llamada República Riograndense. Giuseppe Garibaldi, junto a otros italianos exiliados tras las revueltas italianas de La carbonaria, se puso al servicio de la nueva república y fue uno de los que tomó la ciudad portuaria de Laguna que pasó a ser la primera capital de la República Juliana (en la región de Santa Catarina citada), confederándose con la República Riograndese.
En dicho puerto y esa guerra es donde Anita y Giuseppe se conocieron, y desde el primer momento sus vidas quedaron unidas de por vida: . “Verano de 1839, Anita tiene 18 esplendidos años, y hete aquí que Giuseppe, desde su barco, aburrido hasta la saciedad por la falta de combate, se dedicaba a otear con su catalejo por la costa como distracción… Vio como una bella joven que paseaba cerca del puerto se introdujo en una casa, abrió la ventana y se asomó. Ella se percató de que alguien la observaba desde un barco y, ingenuamente, saludó hacía el barco. Fue un auténtico flechazo para Giuseppe, quedó prendado por el rostro de Anita. Sin pensárselo dos veces, desembarcó, se fue directo hacia la casa, pidió permiso para entrar y nada más contemplar a Anita le dijo lo siguiente: “Usted, debe ser mía”. Ella le contestó “Yo a ti ya te conozco, te vi reflejado en las aguas de un pozo”. Giuseppe no salía de su asombro y, desde entonces no pudieron separarse jamás…”
Anita se entusiasmó con los ideales democráticos y liberales de Garibaldi aprendió con él a luchar con la espada y a disparar, convirtiéndose en una consumada soldado, acompañándole en diversas batallas.
En una delas batallas Anita fue detenida y los soldados del ejército imperial brasileño le dijeron que Giuseppe había muerto. Ella, aprovechando que le había permitido buscar el cuerpo de Giuseppe, al no encontrarlo y aún estando embarazada, escapó en un caballo. Aunque la persiguieron y mataron a su caballo, pudo escapar por la selva y se arrojó al río Canoas. En ese momento los los brasileños la dieron por muerta pero Anita consiguió vadear el río y escapar. Durante 4 días estivo en la selva hasta que pudo contactar con los republicanos y Giuseppe.
Finalmente, con 1.000 vacas que les había proporcionado el gobierno republicano se exiliaron a Montevideo, donde también había guerra (sólo la mitad de las vacas sobrevivieron al largo camino).
Anita fue enviada como embajadora a Italia por Garibaldi, en donde fue aclamada como heroína, para preparar el terreno ante la vuelta de su amor. Garibaldi regresó con mil “camisas rojas” (cuerpo militar creado por Giuseppe en el sitio de Montevideo) para luchar en la primera guerra de la independencia italiana contra Austria. Crearon allí la República Romana, atacada por napolitanos y franceses. Finalmente la república fue derrotada y Garibaldi y Anita tuvieron que huir, buscando refugio en San Marino.
Durante esa retirada enfermó y murió de fiebre tifoidea, con solo 28 años, en 1849. Anita Garibaldi fallecía en brazos de su gran amor Giuseppe y con gran dolor la tuvieron que dejar medio enterrada, porque las tropas enemigas los perseguían. Anita estuvo presente en el corazón de Garibaldi durante toda su vida, pese a que se casó dos veces más y su sepulcro está junto al de él, en la colina romana de Janículo, donde tienen sendas estatuas ecuestres. Una avenida en la ciudad de Nervi lleva su nombre y dos municipios brasileños de Santa Catrina también: El de “Anita Garibalidi” y el de “Anitápolis”
SI ESTÁ SUFRIENDO VIOLENCIA DE GÉNERO O CONOCE ALGÚN CASO: el teléfono gratuito del Gobierno es el 016 (dicha llamada no queda reflejada en la factura telefónica).