A pesar de que la víspera Batasuna había hecho pública una declaración en la que aseguraba que la estrategia actual del Gobierno español «impide y hace inviable el proceso de diálogo político multilateral en Euskal Herria», viagra sale José Luis Rodríguez Zapatero mantuvo ayer su discurso habitual sobre las expectativas en el discurrir del proceso de «fin de la violencia» y sus llamamientos a que «los que han estado de una u otra manera apoyando la violencia» dejen «ese camino y vayan a la democracia». En el marco de la celebración que en el Congreso de los Diputados se hizo del XXVIII aniversario del referéndum de la Constitución española conmemoración en la que algunas crónicas cuentan que el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, se mostró muy bromista José Luis Rodríguez Zapatero apuntó tres mensajes. El primero, que mantiene sus expectativas para alcanzar «el fin de la violencia» y que en ese sentido la situación actual, incluso en lo referido a la kale borroka, es «mejor que hace diez años, cinco, dos y uno».
El segundo fue que el Ejecutivo está «en su sitio» porque mantiene «los principios de las reglas del juego democrático».
El tercer mensaje lo dirigió a quienes «han estado de una u otra manera apoyando la violencia», para que dejen «ese camino y vayan al de la democracia, la palabra y la libertad». «Que tengan el valor de hacerlo», declaró, recalcando que «el más valiente es que el esgrime sólo la palabra en la defensa de sus ideas». A ello añadió que para tener «representación legal» hay que «cumplir la Ley de Partidos», asegurando que ese es el criterio que tiene y que mantendrá en el futuro el Gobierno español.
Las palabras de Zapatero distan muy poco o nada de su discurso habitual, pese a que la víspera Batasuna había advertido de que «la apuesta consciente» del Gobierno español está impidiendo el proceso.
La formación independentista, en una declaración leída por Joseba Permach y Arnaldo Otegi, llamaba la atención sobre la estrategia de acoso policial y judicial de Madrid, a lo que se sumaban las manifestaciones del PSOE jactándose de haber hecho menos que Aznar. Junto a ello, Batasuna denunciaba la desnaturalización de los contenidos de carácter político que debe conllevar un proceso de negociación política resolutiva.
Por todo ello, destacaban que «es responsabilidad del presidente español y su Gobierno modificar esta actitud».
Según advertía Batasuna, «sólo desde el reconocimiento a las partes y sus derechos, desde el respeto a los compromisos, y teniendo una clara voluntad de que el proceso sirva para la resolución del conflicto político, será posible articular un proceso serio y con bases democráticas sólidas en Euskal Herria».
Emplazamiento de LAB al presidente español
El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, invitó ayer al presidente del Gobierno español a que «dé pasos adelante», rompa la presión del PP y «haga cambios jurídicos para que la izquierda abertzale pueda actuar en política como cualquier otro partido». Valoró positivamente el llamamiento en el mismo sentido hecho por UGT a Zapatero porque «no es de recibo que, tras ocho meses de alto el fuego, la izquierda abertzale todavía esté sufriendo las consecuencias judiciales y políticas» de unas «terapias» que PP y PSOE impulsaron «en otro momento».